27 mayo 2008

Cuida lo que tienes!!!

Hace tiempo, fuimos mi esposo y yo a un autobaño. Mientras esperábamos el carro, me puse a hojear revistas. Decidí leer una de "contenido" que me llamó la atención por que uno de los temas principales era la Infidelidad.

Había todo un análisis acerca del tema:
• Quienes son más infieles (ellos o ellas)
• Las razones mas frecuentes de la Infidelidad
• Quienes son mas "honestos" al declarar que fueron infieles
• Quienes perdonan más fácil la infidelidad etc.

Los resultados son otro tema, en esta ocasión les quiero compartir algo que en realidad llamó mucho mi atención.

Dentro de la investigación había una serie de entrevistas que le realizaron tanto a traidores como traicionados. Entre todos me dejó con la boca abierta la experiencia de una chica que contó que ella estaba casada con un hombre que, según sus propias palabras, “se robó”!!

Contaba que desde que lo conoció le había gustado y se propuso que fuera suyo, que pensaba que era buen marido y simplemente lo quería para ella. Se hizo su amiga, los invitaba a salir, le preguntaba de sus planes, de su vida, de sus proyectos, de su trabajo y se la pasaba elogiándolo.

Dijo que además hizo lo posible por conocer a fondo su vida marital, que le gustaba y que le molestaba, los defectos y virtudes de su mujer. Luego se dio a la tarea de convertirse en la mujer ideal para él. Se arreglaba como a él le gustaba, le llevaba regalitos (cosas que se pudiera comer para no dejar rastros) y un día que la esposa estaba de viaje, lo invitó a su casa.

Ella sabía lo que a él le molestaba de su esposa: era algo desordenada y mala cocinera, así que se esmeró por ser todo lo contrario. Explicó cómo él se rehusaba a seguirle el juego, pero ella utilizó todas sus artimañas y lo hacía creer que tenía pareja y no le interesaba como hombre, si no solo como amigo por que “congeniaban”.

Poco a poco lo “engatusó”.

Hizo todo lo que pudo, durante mucho tiempo sin darse por vencida ni quitar el dedo del renglón. Iniciaron una relación y cuando ella estaba completamente segura de que era suyo, comenzó a dejar "pistas" para que la esposa se diera cuenta del amorío sin tener que decirle directamente.

Ella conocía tan bien a la esposa, que no fue difícil hacer que ella lo dejara y él no hiciera nada al respecto.

Dijo que eran una pareja feliz y con un bebé y la “otra” era parte de su pasado.

Moraleja: Cuiden lo que tienen, valoren al hombre que eligieron para toda la vida, por que, aun que a veces les pueda parecer muy flaco o barrigón, muy moreno, orejón, güero, demasiado gruñón o poco sensitivo, puede llegar alguien que lo valore y se lo lleve!!!

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